CAN FONTANELLES

Los motivos de su instauración como parque natural se basan en la importancia religiosa y cultural del Monasterio y del Santuario y en la belleza y la singularidad de la montaña, que han convertido este lugar en un centro turístico internacional.
La Montaña de Montserrat presenta unas características tan sorprendentes que se ha convertido uno de los símbolos de Cataluña.
La explicación científica sobre la génesis del macizo de Montserrat hay que hablar de un gran golfo marino de aguas poco profundas, existente hace cosa de 50 millones de años, situado donde se encuentra ahora la Depresión Central Catalana, y al que desaguaban impetuosos ríos procedentes de las laderas de un macizo catalano-balear desaparecido, que aportaban grandes masas de guijarros. Los guijarros se fueron mezclando con materiales más pastosos y formaron una masa que, cuando este macizo catalano-balear desapareció y los terrenos circundantes al gran golf enrolaron en medio de cataclismos geológicos, el relevo de Montserrat fue emergiendo del fondo del mar con una gran brusquedad de formas -pongamos en ella, hace diez millones de años- y sus relieves quedaron a merced de vientos, lluvias y heladas hasta convertirlos en esta espectacular escenografía que ahora admiramos.
La cima de Sant Jeroni (1.236 m), ofrece un extraordinario panorama desde los Pirineos al mar (incluso los días de visibilidad excepcional se ve Mallorca) el popular monolito del Cavall Bernat es uno de los más conocidos, el macizo de Montserrat pertenece a la Cordillera Prelitoral Catalana, que se extiende entre las depresiones Central y Prelitoral de Cataluña.
La montaña de Montserrat es, sobre todo, una montaña de encinares y, a pesar de su apariencia de montaña más bien árida y rocosa, cuando nos adentramos por sus caminos descubrimos hasta qué punto se desarrolla una espléndida vegetación lozana. El paisaje es único, formado por multitud de rocas y agujas.
Por el Parque Natural de la Montaña de Montserrat creen y finalizan muchos senderos de gran recorrido, entre los que destacan:
• El GR-172 pasa por Can Massana, por el Monasterio de Montserrat y Collbató.
• El GR-4 pasa por Marganell, el Monasterio de Montserrat y en preparación el tramo de Collbató y El Bruc.
• El GR-6 y GR-6-1 cruza Collbató hasta llegar al Monasterio.
• El GR-5 cruza Collbató, pasando por el Monasterio y Monistrol de Montserrat.
• Y finalmente el GR-96, que viene de Barcelona y pasa por Monistrol, finaliza el Monasterio de Montserrat.
• Otros caminos de fácil acceso como el de las Baterías en Collbató o el camino del Ángel en Monistrol.
Aún así, existen multitud de caminos, senderos y pequeños senderos que se adentran por las interioridades de la montaña; hay, sin embargo, un cierto grado de entrenamiento y de experiencia montañosa para afrontarlos.
Son célebres las Cuevas de Collbató o del Salitre. La más grande del conjunto de las cuevas de Collbató, con unos 500 metros de recorrido, está abierta al público con visitas organizadas los fines de semana y festivos.
El recorrido subterráneo, perfectamente alumbrado y equipado, nos adentra en las profundidades de la cavidad de la cueva del Salitre, la más conocida y visitada del Principado, es un flamante referente de la historia de la espeleología catalana.
Como consecuencia de la presión humana y del incremento del hábitat en el entorno de la montaña, la fauna, y especialmente la gran fauna, inició un proceso de desaparición, situación que se agravó tras el importante incendio que se produjo en la montaña en 1986. Hoy en día, las especies que se pueden encontrar son, en general, típicamente mediterráneas, aunque conviven, en ciertos ambientes de la sierra, con algunas de tendencia centroeuropea.
Algunos de los animales que podemos encontrar son el jabalí, la ardilla, la jineta, la cabra salvaje, la víbora hocicuda, la serpiente verde, la salamandra, el águila perdicera, halcón peregrino o la paloma torcaz.